Consejos para coger setas
Noviembre es un mes que no gusta a todo el mundo: las temperaturas son más bajas, los días son más cortos tras el cambio de hora y las lluvias y el viento nos acompañan durante muchas jornadas.
Pero también tiene algunas cosas buenas, y más en la provincia de Castellón, donde las temperaturas son bastante suaves y nos permiten disfrutar de nuestros parajes naturales.
Coger setas es una de las actividades que más vinculamos con esta época del año, algo que se nota en la gastronomía, sobre todo en zonas de interior y de montaña.
Ir a coger setas puede ser muy beneficioso si te gustan los planes en la naturaleza y el turismo activo: pasearás, respirarás aire puro y tendrás que ir agachándote cuando veas un ejemplar que poner en tu cesta.
Sin embargo, tenemos que tomar algunas precauciones para evitar coger ejemplares tóxicos y/o contaminados, o dañar el entorno.
Información y precaución, clave para ir a coger setas
El primer consejo es tener una buena guía o una App de setas para saber cuáles son comestibles o cuáles no.
Estas guías y aplicaciones suelen tener descripciones macro y microscópicas de cada hongo, además de un capítulo de intoxicaciones, información detallada sobre hábitat y distribución o fotografías para comparar los ejemplares.
Llevar una cesta de mimbre o un «contenedor con agujeros» es imprescindible: al poner las setas en estos recipientes, permitimos que se aireen y evitamos que se fermenten en el camino de vuelta a casa.
Además, los expertos recomiendan separar unas especies de otras, envolviéndolas, para reducir el riesgo de contaminación.
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) también ha publicado algunos consejos relacionados con la recogida de setas.
El primero de ellos es evitar la recolección de los recursos micológicos en zonas cercanas a ciudades, carreteras, zonas industriales o explotaciones agrícolas.
Conviene coger solo aquellas especies que conozcamos bien y que sean fácilmente reconocibles, como las setas de cardo, los champiñones, la seta de chopo, los níscalos o los boletus, aunque las variedades dependen de cada zona geográfica.
Antes de consumir setas u hongos silvestres, siempre debemos revisarlos y limpiarlos, uno a uno, con un cepillo, una navaja o un paño húmedo.
Y nunca tenemos que comerlos crudos, ya que muchas especies son comestibles, pero porque pierden su toxicidad cuando las cocinamos.
Si tienes dudas, la mejor opción es no comerlas, aunque siempre puedes consultar con un experto para que revise tus setas.
Respetar el entorno
Otra cuestión importante cuando cogemos setas es el entorno, que debemos alterar lo menos posible.
Al fin y al cabo, tanto las pisadas, como el paso de coches o arrancar los hongos del suelo supone cambios en el ecosistema, por eso tenemos que hacerlo con cuidado.
Respecto a cómo deben cogerse las setas, lo ideal es arrancarlas enteras para favorecer su conservación.
Esto es especialmente relevante en los boletus, porque en el caso de níscalos o setas de cardo es mejor cortarlas con una navaja, ya que, si rompemos su raíz, no volverán a salir.
Además, se recomienda coger una cantidad de setas «normal» y no abusar: si recolectamos demasiados ejemplares, es fácil que se deterioren y que no podamos comerlas.
¿Y qué hacer en caso de intoxicación?
Pues, básicamente, acudir al médico o a un hospital.
Lo habitual es que, una vez llegues e informes del ejemplar que has comido, se midan parámetros como la orina o la sangre para evaluar el estado de riñón e hígado.
En algunos casos, puede realizarse un lavado de estómago, aunque sea de manera preventiva.
Dónde coger setas en la provincia de Castellón
La provincia de Castellón es rica en lugares para buscar setas en otoño, sobre todo en las zonas de interior.
Concretamente, en los bosques de la comarca dels Ports, el Alto Palancia, l’Alt Maestrat, l’Alcalatén, la Tinença de Benifassà o la Sierra de Espadán.
Esta práctica es muy común en pueblos como El Toro, Cortes de Arenoso, Cirat, Ballester, Villamalur, Vilafranca del Cid, Vistabella, Montanejos, Morella o La Pobla de Benifassà.
La actividad está regulada y vigilada, especialmente en zonas protegidas y en Parques Naturales.
Por eso, debes preguntar en el municipio correspondiente para saber si es necesario sacar un permiso o pagar alguna tasa para coger setas silvestres, o qué tipo de restricciones hay respecto a cantidades, especies, etc.
Para reducir los accidentes, los expertos recomiendan:
- Salir pronto para evitar que caiga la noche en medio de la montaña.
- Revisar las condiciones meteorológicas antes de salir.
- Llevar ropa y calzado adecuado.
- Tener batería suficiente en el teléfono.
- Ir siempre acompañados.
En Camping Ribamar somos amantes del turismo activo.
Cuando vengas a visitarnos, pregúntanos qué actividades puedes hacer en nuestro entorno, la Sierra de Irta, y en otros parajes más o menos cercanos de la provinica de Castellón. ¡Te informaremos encantados!
